Buenas, un día más:

Con
el comienzo del cuarto trimestre, las acciones de gran capitalización de EE.UU.
finalmente salieron de su rango de cotización multi-semanal, con un repunte de
la volatilidad, e importantes sectores cayeron por debajo de los niveles de
soporte mientras los bonos repuntaron. En otras palabras, fue un típico
movimiento de tipo risk-off en la sesión.

Vamos
a observar los gráficos semanales tanto del Dow Jones (DJI.I) como del S&P
500 (SPX.I).

El
Dow Jones, con las ventas del miércoles, encontró su camino de vuelta hacia su
delgada línea alcista de 2011. Hay que destacar que, como representa
el Índice de Fuerza Relativa (RSI) en la parte baja del gráfico, ha estado
en una caída constante desde principios de 2013. Por tanto, está mostrando una
importante señal de divergencia frente al precio. Desde esta perspectiva, el
Dow Jones tiene bastante recorrido aún a la baja y, al menos, parece probable
volver a probar los mínimos de principios de agosto cerca de los 16.350 puntos.

El
S&P 500, por su parte, cayó el miércoles hacia su línea de tendencia
alcista de 2009 en gráfico logarítmico. Además, hay que destacar la divergencia
negativa entre el momentum y el precio, que apunta a mayores precios bajistas
en el índice. El siguiente soporte lógico se situaría en la zona de 1.900
puntos, es decir, los mínimos de agosto, que a pesar de sobrepasar hacia 1.850
puntos, no se pueden descartar. Una vez más, aconsejaría, frente a perseguir al
índice a la baja, ya que podría crear un mejor ratio riesgo/beneficio, estar
corto en rebotes de sobreventa.

Éxitos en las operaciones